CineRunner: VIVIR SIN PARAR

Título Original: Sein letztes Rennen
País: Alemania.
Año: 2013
Dirección: Kilian Riedhof
Guión: Kilian Riedhof, Marc Blöbaum, Peter Hinderthür
Música: Peter Hinderthür
Fotografía: Judith Kaufmann 
Intérpretes: Dieter Hallervorden, Tatja Seibt, Heike Makatsch, Heinz W. Krückeberg, Frederick Lau, Otto Mellies, Mehdi Nebbou, Katrin Saß. 
Duración: 114 min. 


GÉNERO: Drama. Vejez. Deporte.


SINOPSIS: Paul Averhoff una vez fue una leyenda como corredor de maratón. Incluso ganó la medalla de oro en las Olimpiadas de Melbourne de 1956.

Pero los días de gloria han pasado. Ahora tiene más de 70 años y vive con su esposa Margot en un hogar de ancianos donde solo se puede elegir entre apuntarse al coro o a las clases de manualidades y ...¡¡¡No aguanta más!

Como terapia, se calza sus viejas zapatillas y ante el asombro de comapeñeros y empleados, empieza a correr a diario por el parque de la residencia dispuesto a prepararse para el maratón de Berlín y repetir viejas hazañas. Con su empeño consigue el apoyo incondicional de "casi" todos sus vecinos de residencia.

Solo la muerte de su esposa le aparta del objetivo y le hace caer en una gran depresión. Tendrá que buscar fuerzas para recuperar la ilusión y cumplir la promesa que le hizo a Margot antes de morir.


LO MEJOR: Es una película que va directo al corazón del espectador. Ahonda en el mundo de la vejez y la soledad que ello conlleva. El transcurrir inevitable de los años. Es un enfoque positivo y de superación de como afrontar la etapa final de nuestras vidas. El protagonista es un antiguo maratoniano que para intentar luchar contra lo establecido vuelve a lo que era su antigua pasión. La ilusión que desprende a la hora de afrontar la maratón, como si fuera su primera carrera te resultará muy familiar, obsesionándose con los carbohidratos, ácidos láctico, etc. Tiene dos momentos memorables: La comparación que hace de la vida y el maratón y sobretodo, la escena que más me ha gustado: Cuando va a inscribirse en la carrera y se ha agotado el plazo, entonces, sorprendentemente, reune un requisito que le permite participar.


LO PEOR: Llega a resultar demasiado edulcorada en algunos momentos e igual su metraje es un poco excesivo.


RESUMIENDO: Es una crítica al trato que reciben nuestros mayores con el deporte como telón de fondo para suavizar el mensaje. A todo maratoniano le encantará.